sábado, 20 de febrero de 2021

AMX Noticias 19/02/21

Campeonato Nacional de Parejas: Atlantis Jr. & Flyer vs. Raziel y Cancerbero (r) Tigre Infante: Una lucha que a excepción del ritmo reunió en su primera caída a casi todos los elementos que debe de reunir una lucha titular.  Típico primer acto en donde se buscó dar la impresión de que los campeonatos estaban en riesgo, sin embargo, Raziel salió bastante impreciso, visiblemente distraído y sin fuerza en las piernas, razón por la que tuvo dificultades para realizar movimientos que en él son de trámite. Los rudos se llevaron inmerecidamente la primera caída. En mi opinión, los errores se castigan y ante los flagrantes errores de Raziel, era justo que los técnicos se llevarán la primera caída, total, quedaba una segunda caída para llegar al objetivo de una tercera caída. Sin represalias, no hay mejoría, algo básico que no entiende la gente del CMLL.

No obstante, la experiencia de los Cancerberos es notoria y en la segunda caída eligieron un formato de lucha más rudimentario pero más eficaz. Lucieron más amenazantes  aunque era obvio que tendría que venir la reacción de los técnicos quienes, hasta este momento, solo habían jugado un papel de comparsas.

La tercera caída reafirmó la impresión de que la lucha descansó completamente en Los Cancerberos, tanto a la ofensiva como a la defensiva dieron pauta para atacar y hacer lucir a los campeones lo cual hizo deslucir a estos quienes, hay que decirlo, no mostraron personalidad ni jerarquía. La lucha funcionó en lo técnico por la larga experiencia de Los Cancerberos pero, en cuanto a las emociones, a pesar de notables evoluciones de los rudos, no se alcanzaron los picos dramáticos que debió de tener la lucha. Del lado de los campeones, reitero, faltó personalidad y trabajo en conjunto- El esfuerzo físico no fue parejo porque mientras Atlantis lucía en buena condición, por momentos, Flyer lucía falto de aire.

Flyer y Atlantis Jr. no lucieron como campeones mientras que Los Cancerberos fueron de menos a más, reafirmando su calidad y capacidad de acoplamiento, pero demostrando que tampoco hacen milagros.

El toque de emoción que hizo falta, sin duda, fue por culpa de los técnicos quienes no mostraron un amplio repertorio y por el contrario descansaron al 100% en la propuesta de los rudos. 

 

Imagen: CMLL